¿Sabías que 43% de las mujeres sufren de disfunción sexual, comparado con 31% de los hombres…?
¿Qué es la Disfunción Sexual?
Una disfunción Sexual puede definirse como:
“Cualquier alteración en el deseo sexual, o cambio en las características fisiológicas o sicológicas del ciclo de respuesta sexual (deseo-excitación-orgasmo) que provoque problemas o dificultades interpersonales”
La Disfunción Sexual Femenina
En el caso de las mujeres, padecimientos físicos como la Incontinencia Urinaria o el Prolapso de Órganos Pélvicos se asocian estrechamente con la Disfunción Sexual. Se estima que más de una cuarta parte de las mujeres con estos padecimientos sufren de Disfunción Sexual.
La edad es otro factor importante, puesto que después de los 50 años hasta 1 de cada 2 mujeres sufren de alguna Disfunción Sexual.
La Disfunción Sexual Femenina (DSF) puede ser provocada por los siguientes factores:
1. La Edad
La disminución de niveles estrogénicos que caracteriza a la menopausia provoca que un número significativo de mujeres experimenten una importante disminución del libido y la respuesta sexual, resequedad o flacidez vaginal, y frecuentemente la presencia de dispareunia (dolor genital antes, durante o después del acto sexual).
2. Factores Educativos y Culturales
Frecuentemente cuestiones culturales o educativas provocan que la mujer que padece alguna Disfunción Sexual Femenina no busque la asistencia de su médico, por lo que padecimientos que son perfectamente tratables pueden prolongarse indefinidamente.
3. Factores Emocionales
Frecuentemente existen aspectos emocionales que dificultan las relaciones interpersonales, y que se traducen en alteraciones del deseo sexual, o de la habilidad para lograr la excitación y/o el orgasmo.
4. Problemas Físicos
Muchos padecimientos propios de la mujer pueden llevar a una Disfunción Sexual Femenina, principalmente:
- Incontinencia urinaria
- Prolapso de órganos pélvicos
- Flacidez vaginal
- Desgarres vaginales
- Dispareunia y Vaginismo
5. Enfermedades Crónicas
Padecimientos como hipertensión arterial, enfermedad isquémica cardiaca, enfermedades renales crónicas, diabetes mellitus, cáncer, trastornos neurológicos degenerativos, antecedentes de cirugías genitales, etc.
6. Fármacos
Algunos fármacos se han asociado a la Disfunción Sexual, tales como antihipertensivos, diuréticos y antidepresivos, entre otros. También el consumo de alcohol se relaciona con la DSF.
Soluciones para la Disfunción Sexual Femenina
La raíz de la Disfunción Sexual en una mujer bien podría ser multifactorial, una combinación de factores médicos, sicológicos o ambientales (como en el caso de los fármacos). Por esta razón, cada paciente debe examinarse de forma individual, siendo los factores fisiológicos los primeros que hay que evaluar y descartar, antes de abordar aspectos emocionales o sicológicos.
Los problemas relacionados con los órganos pélvicos, como la incontinencia y los diferentes tipos de prolapso (vejiga caída, recto caído, matriz, caída, etc.) deben ser detectados y en su caso, tratados por un uroginecólogo.
Un especialista en Medicina Pélvica también puede abordar problemas relacionados con la flacidez vaginal con cirugías de reconstrucción y rejuvenecimiento vaginal. Existen también modernas técnicas de Cirugía Estética Vaginal que pueden solucionar cuestiones de malestares relacionados con el aspecto estético del área genital.